El
encontronazo se produjo, Marcos tuvo que agachar la cabeza esquivando
una estocada que iba directa a su cuello, y con un ágil movimiento
acabó con el primer sombra, en el mismo momento en el que se produjo
la embestida perdió de vista a sus amigos, pero no era momento de
preocuparse por ellos, tenía que luchar. Moriría pero lo haría
defendiéndose hasta el final.
increíble
velocidad entre sus atacantes, a Toni no le veía por ningún lado
¿Habría caído ya?
Lo
que le ardía por dentro le quemaba aun mas cada vez que acababa con
algún sombra, necesitaba sacarlo fuera, pero no era capaz, no sabía
como hacerlo, y tampoco se encontraba en la situación perfecta para
buscar una solución asique continuó luchando y esquivando golpes.
Un golpe seco en el pecho le hizo caer al suelo, un sombra le había
dado una patada, y ese mismo ahora intentaba matarle mientras que
Marcos rodaba por el suelo para alejarse de su contrincante. Cuando
tuvo la ocasión se levantó rápidamente, y aun estando arrodillado
adelantó la espada clavándosela a su perseguidor.
Por
mas sombras que mataba no parecía que disminuyera el número y cada
vez se encontraba mas agotado. Aunque luchaba con todas sus fuerzas,
su respiración era entrecortada, y sus movimientos cada vez eran mas
torpes
Se
plantó delante de un nuevo rival lanzando una estocada que paró con
facilidad, este parecía mas fiero que los otros, debía de ser quien
estaba al mando de aquel grupo, su contrincante le lanzó una
estocada a las piernas que esquivó con un salto, acto seguido soltó
la espada a la cabeza del sombra que esquivó justo a tiempo, pero se
clavó en el hombro, su enemigo profirió un grito de dolor mezclado
con rabia. Marcos sonrió satisfecho, pero al instante se tuvo que
agachar debido a que alguien le atacaba por detrás, ahora tenía a
dos contrincantes para el solo.
Se
puso en guardia esperando la estocada, que no tardó en llegar a
manos del nuevo rival, lo paró con facilidad, pero tuvo que saltar
hacía atrás debido a que el otro le atacaba a traición desde un
lado.
Pronto
acabó con el nuevo que ahora yacía a los pies del joven y ahora
volvía a enfrentarse a uno solo.
Esta
vez fue Marcos quien atacó primero, cogiendo por sorpresa a su
rival, que paró el golpe con dificultad, a pesar de que tenía un
hombro herido seguía luchando con fuerza.
Lo
que pasó a continuación pasó muy rápido, el sombra levantó la
espada para atacarle pero se quedó a medio camino con cara de
sorpresa, acto seguido cayó sin vida al suelo, se fijó que tenía
una flecha clavada en mitad de la espalda, el joven miró a su
alrededor buscando a Toni, quien había tenido que lanzar la flecha,
pero no le vio por ningún lado, a continuación otra flecha se clavó
a en un sombra cerca de el, los rivales fueron cayendo con
proyectiles clavados en distintas partes del cuerpo. Marcos miró a
su alrededor sorprendido, de lo que estaba ocurriendo. De repente vio
movimiento entre los árboles y fue cuando lo vio, unos seres
encapuchados estaban lanzando flechas desde las ramas matando a sus
enemigos, eran amigos, no sabía de quien se podía tratar pero
estaban con ellos.
Cuando
fueron cayendo los sombras vio a Niva y a Toni igual de sorprendidos
que el.
-
La gente del bosque nos está ayudando-. Dijo sorprendida Niva
mirando a su alrededor cuando ya el último de los sombras había
caído
Los
tres se quedaron en silencio viendo aquella gente subida a las ramas
de los árboles mirándoles con los arcos en la mano. Niva hizo un
gesto con las manos y se dio la vuelta para seguir el camino.
-
Nos vamos-. Dijo girando la cabeza para mirar a los anonadados
jóvenes que seguían con la mirada fija en los árboles.
-
¿Que has hecho con las manos?-. Preguntó Marcos cuando ya se habían
puesto a su altura.
-
Les he dado las gracias-. Se encogió de hombros al responder.
-
Ruth no se lo va a creer cuando se lo contemos-. Dijo Toni
entusiasmado por lo ocurrido.
-
No sabía que aun quedarán s
Volvió
a agachar la cabeza al escuchar una espada acercarse a el a gran
velocidad, giró sobre si mismo y se plantó delante de su atacante,
tuvo que parar una estocada mas antes de que cayera muerto. Eran
demasiados. No durarían mucho. Vio a lo lejos a Niva dándolo todo,
se movía de un lado a otro coneres en los bosques-. Dijo Marcos
mirando a Niva que iba unos pasos por delante de los jóvenes.
-
Yo tampoco-. Contestó el hada mirando al frente, aun caminaban por
el bosque, no era muy frondoso y se podía caminar sin aminorar la
marcha.- Deben de ser los últimos que quedan-.
-
A sido una suerte entonces de que se encontrarán justo aquí, en
este bosque-. Opinó Toni, los demás le dieron la razón.
-
Nos hemos jugado la vida para nada-. Dijo Marcos pensando en que no
habían conseguido la información que andaban buscando.
-
No te equivoques-. Le contradijo Niva.- Sabemos que algo dentro de
ti, ha despertado, y sabemos que ese algo, aterra a los sombras-.
-
Pero no sabemos el que-.
-
Seguro que eso era lo que buscaba el sabio en el libro que le
llevamos del Tibet-. Los dos jóvenes agacharon la cabeza al recordar
lo que ocurrió en aquel templo.- Por eso tenemos que ir a verle
cuanto antes, ya le hemos dado tiempo suficiente para que lo
averiguara.
-
¿Y a llegado la hora de que?-. Preguntó Toni recordando lo que
había dicho el sombra al que habían torturado.
-
No lo se, pero no me ha gustado nada el tono con el que lo ha dicho-.
Opinó Niva, ya estaban cerca del punto de teletransporte,
Marcos
pensó en ese algo que había despertado dentro de el, al fin y al
cabo ¿podía tener poderes al fin y al cabo? Pero no podía ser el
hijo de ningún elemento, todos ya habían aparecido, pero entonces
¿Que poderes tenía? La sensación que sentía por dentro menguaba,
a cada paso que daba para alejarse de la batalla, pero seguía
sintiéndolo, quería seguir sintiendo aquello dentro de el.
-
Hemos llegado-. Informó Niva, debajo de sus pies se podía ver
tallado en una roca un círculo con símbolos referentes a los cuatro
elementos dibujados dentro, con un suspiro entraron dentro formando
un triángulo.
-
Vámonos entonces-. Dijo Marcos mirando a Niva que asintió y acto
seguido cerró los ojos concentrándose.
En
unos segundos todo comenzó a temblar y sabía que ya se largaban de
Brasil. Todo comenzó a dar vueltas, tuvo que agarrarse a Toni para
no caerse, miró a Niva y le sorprendió verla como si nada estuviera
sucediendo a su alrededor, los viajes solían durar unos cuantos
segundos, pero a Marcos le parecía una eternidad.
-
Nunca me acostumbraré a....-. Comenzó a decir cuando todo cesó de
girar a su alrededor, pero un vuelco al estómago le hizo callar, fue
palideciendo por momento al ver la escena que tenía delante.